Un astrónomo hizo un gran descubrimiento que le proporcionó fama y dinero. Puede que tú también te hagas rico: ¡juega y que la suerte te acompañe!
Un gran descubrimiento
El astrónomo Smith observaba atentamente por el telescopio, examinando el planeta V-13, que se encontraba en la galaxia Alfa Centauri. Nuestro héroe acababa de inventar el nombre de su descubrimiento, realizado literalmente unos minutos antes.
¡El planeta V-13 era enorme! Su superficie, cubierta de lava ardiente, irradiaba un colosal flujo de energía térmica que se disipaba en la galaxia vecina.
Sin embargo, en muchos lugares, la masa incandescente se había solidificado. Quizás aún conservaba el calor, pero Smith no podía responder a esta pregunta sin un análisis espectral. Y, sinceramente, le interesaban mucho más las monedas de fuego que la magma solidificada.
Monedas de fuego
Mirando por el telescopio, Smith descubrió unos artefactos extraños. A primera vista, parecían monedas que ardían como una hoguera de leña seca. Sin embargo, a diferencia de las ramas, las enormes monedas no se convertían en cenizas.
Smith no conseguía entender qué era: ¿una ilusión óptica, un fenómeno atmosférico desconocido, una reacción química que se desarrollaba de una manera tan inusual o algo más? Esperaba que fuera la última opción, soñando con inmortalizar su nombre en el mundo de la ciencia.
Hacia las profundidades del cosmos
El astrónomo informó a sus superiores sobre el descubrimiento. Naturalmente, los jefes, sentados en lo más alto, leyeron el informe de Smith. Tras estudiar los datos disponibles, decidieron enviar una expedición al planeta V-13 para investigar los procesos que tenían lugar en su superficie. En realidad, a los grandes jefes solo les interesaban las monedas de fuego, pero eso son detalles.
A Smith, como autor del gran descubrimiento, le ofrecieron formar parte de la tripulación. El científico aceptó: tenía muchas ganas de ver las monedas de fuego con sus propios ojos, y no a través de las lentes de un telescopio astronómico. Smith superó todas las pruebas y exámenes necesarios, que confirmaron su aptitud para volar más allá del sistema solar.
En otro planeta
El día señalado, la nave espacial despegó desde un cosmódromo secreto. Los motores nanotecnológicos permitieron al cohete alcanzar la órbita V-13 en una semana. Casi toda la tripulación aterrizó en la superficie del lejano planeta, ya que la baja temperatura de la magma solidificada hacía posible la estancia de personas en determinadas zonas.
La atmósfera de V-13 resultó inhabitable debido al alto contenido de dióxido de carbono, por lo que no se podían hacer selfies sin trajes espaciales, lo cual decepcionó un poco a Smith, que quería hacerse con unas fotos únicas.
Monedas y piedras preciosas
Las monedas de fuego parecían formaciones de partículas sólidas, pero los científicos no pudieron explicar la naturaleza del fuego. ¡La aparición de fuego con un contenido mínimo de oxígeno en la atmósfera era en sí misma un milagro inexplicable!
Los astronautas intentaron tomar muestras de la materia, pero el intento no tuvo éxito: las monedas en llamas se destruían por completo, desintegrándose en cristales con forma de frutas y bayas. Eran auténticas piedras preciosas…
Vuelo al planeta V-13
La tripulación notó que las monedas aparecían regularmente en diferentes lugares. El fuego que envolvía los artefactos resultó ser completamente inofensivo para los humanos. Los astronautas destruyeron un par de docenas de monedas de fuego, apenas descubrieron esta característica. ¡Ahora los científicos tenían un montón de piedras preciosas! Mientras tanto, seguían apareciendo nuevas monedas aquí y allá…
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