Los científicos de la estación Gravity trataban de aprender a controlar el campo gravitatorio de la Tierra. Podrían haberlo conseguido, pero un limpiador lo estropeó todo…
Un gran proyecto científico
La estación de investigación Gravity se encuentra en la órbita del planeta Alfa-14. Es aquí donde se llevan a cabo investigaciones que permitirán a los seres humanos controlar la fuerza de la gravedad terrestre.
¡Los resultados de los experimentos en que trabajan los científicos de la estación Gravity cambiarán literalmente el mundo!
Por supuesto, para mejor.
Un gasto desmesurado
Bueno, eso en teoría. Por ahora, el Instituto Mundial de Física y Mecánica Cuántica no hace más que invertir toneladas de dinero en investigaciones cuyos resultados son dudosos.
Sin embargo, hay que mantener a todo un equipo de luminarias de la ciencia, y sus apetitos financieros son muy considerables. Por otra parte, el laboratorio, los materiales, los reactivos y otros componentes vitales para los experimentos también cuestan mucho dinero.
Fama en Internet y en todo el planeta
Mientras tanto, los científicos se encontraban en un callejón sin salida, por decirlo de manera no oficial. Sin embargo, los informes decían que los experimentos continuaban y que las mentes más brillantes del planeta disponían de numerosos resultados provisionales. La dirección del instituto creía sinceramente en estas respuestas verosímiles hasta que apareció en Internet un vídeo de uno de los experimentos.
¡Los científicos se divirtieron como pudieron! Según las normas técnicas, debían utilizar modelos de planetas y cuerpos celestes fabricados con los materiales más diversos. Sin embargo, los lumbreras de la ciencia dieron rienda suelta a su imaginación y utilizaron bombones, rollitos de nueces y hamburguesas. El laboratorio era un auténtico caos…
El conserje que soñaba con ser una estrella
La comida flotaba en el aire y «realizaba» acrobacias dignas de pilotos acrobáticos. Reunió miles de millones de visitas. Parecía que todo el mundo con ojos en la Tierra había visto ese vídeo. Uno de los limpiadores que trabajaba en la estación Gravity quiso hacer realidad su derecho a un minuto de fama y participó en el experimento sin pedir permiso a los científicos.
El muy tonto metió el trapeador en la instalación que simulaba el campo gravitatorio de la Tierra, esperando cientos de miles de «me gusta» y comentarios positivos, pero todo salió mal, como era de esperar de un idiota feliz: el aparato voló en pedazos junto con buena parte de la estación.
Las consecuencias de la idiotez ajena a veces resultan catastróficas, y este es precisamente uno de esos casos…
Materiales de interés
Los científicos supervivientes fueron evacuados. Se buscó al limpiador durante mucho tiempo, pero sin éxito, lo que en general no es de extrañar, ya que se encontraba en el epicentro de la explosión.
Lo más probable es que simplemente fuera aniquilado por la onda de energía protónica.En la órbita del planeta «Alfa-14» quedaban muchos restos de la estación «Gravity» y materiales utilizados por los experimentadores. Además, casi todos los modelos de cuerpos celestes sobrevivieron. Los curadores del Instituto Mundial de Física y Mecánica Cuántica exigieron que se llevara todo lo posible, excepto los restos de la estación de investigación.
Es hora de limpiar la órbita…
Y así, una nave espacial con un grupo de astronautas partió hacia el planeta Alfa-14 con la misión de recoger los objetos y materiales relacionados con los experimentos científicos de la estación Gravity. Para esta tarea, la tripulación recibió emisores de energía que creaban agujeros negros y teletransportaban objetos a la Tierra. Todos los materiales irán directamente al laboratorio.
Además, en el instituto se ha adoptado una nueva norma según la cual los científicos ahora tendrán que limpiar ellos mismos. De lo contrario, algún idiota volverá a meter el trapeador donde no debe y, listo, pérdidas por valor de miles de millones de dólares.
